Del fondo de un armario surgen, casi olvidados entre los recónditos laberintos de la infancia, unos ejemplares dignos de coleccionismo.
Sobre la estantería de un oscuro interior, se han mantenido dormidos e inalterables al paso de los años, que no son pocos. ya que datan de 1962.
Las "Hazañas Bélicas" constituyen un lejano mundo de lectura y entretenimiento con tramas que giran alrededor de acontecimientos más o menos verosímiles que tuvieron lugar durante la Segunda Guerra Mundial y la Guerra de Corea.
Después de años y años guardados salen de nuevo a la luz. Y si me preguntas de donde salieron, tampoco lo recuerdo demasiado. Lo cierto es que ahora puedo volver a disfrutar con estas aventuras prácticamente olvidadas.
Hazañas Bélicas fue una serie de historietas bélicas creada por Boixcar en 1948 y desarrollada por él y otros autores (Josep Maria Sánchez Boix, Vicente Farrés, Alan Doyer, Alex Simmons, Eugenio Sotillos, etc.), además de los entintadores José Martínez Piles y José Martínez, para Ediciones Toray. El denominado "estilo Boixcar" lo convirtió en uno de los cómics españoles más influyentes de la historia, gozando además de múltiples reediciones.
Como bien puede observarse, las portadas a todo color, son una maravilla, con grandes títulos prometiendo aventuras sin tregua, que nos remiten evocando connotaciones fílmicas muy evidentes.
Boixcar fue sin duda el alma de este tipo de cómic.
El acrónimo Boixcar pasó a la historia por una combinación donde se unía el apellido materno y la primera sílaba del nombre de su esposa, Carmen. Tras ese alias se hallaba Guillermo Sánchez Boix (Barcelona, 1917-1960), uno de los grandes dibujantes del cómic de acción.
Guillermo Sánchez Boix luchó en el bando republicano durante la Guerra Civil Española. Cuando terminó, fue recluido en un campo de concentración en la Francia ocupada.
De vuelta a España, Boixcar probó con diversos oficios para poder subsistir hasta que con 26 años comenzó su carrera profesional como dibujante.
En 1948 lo contrató la editorial Toray para que realizase más seriales. Y fue entonces cuando comenzó sus famosas "Hazañas Bélicas", dibujadas con una generosa utilización de las tramas y un detallismo extremo en la ambientación y la documentación. Boixcar murió en 1960 con solo 43 años.
Boixcar estaba un poco menospreciado como dibujante, porque utilizaba fotografía para dibujar la tecnología armamentística de sus historietas. Pese a ello, su dibujo, es muy elegante y audaz. También hay que destacar el pacifismo convencido de todas sus historias, en una época donde lo fácil no era ir con ese discurso, por más que esté empapado de fervoroso catolicismo.
Otro formato de las famosas "Hazañas Bélicas" ...
Sirva como colofón a tanta crueldad la viñeta final de uno de los ejemplares, "Los ídolos beben sangre" ...
Pero no acaba aquí la cosa. El fondo de armario reserva y dispensa mas sorpresas... "Hazañas del Oeste".
La contra de uno de estos cómics.
Y otro mucho más medieval.
No hay duda que los chavalillos de los años 60´ nos entreteníamos con cosas mucho más interesantes que las que hoy en día dispensa una terminal de telefonía o tablet, ya que al parecer, es su única opción preferida.
Y es que a la juventud, en general, les da mucha pereza leer.
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